lunes, 31 de enero de 2011

Salmos 34

Salmos 34

1. Bendeciré a Jehová en todo tiempo;
Su alabanza estará de continuo en mi boca.
2. En Jehová se gloriará mi alma;
Lo oirán los mansos, y se alegrarán.
3. Engrandeced a Jehová conmigo,
Y exaltemos a una su nombre.
4. Busqué a Jehová, y él me oyó,
Y me libró de todos mis temores.
5. Los que miraron a él fueron alumbrados,
Y sus rostros no fueron avergonzados.
6. Este pobre clamó, y le oyó Jehová,
Y lo libró de todas sus angustias.
7. El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen,
Y los defiende.
8. Gustad, y ved que es bueno Jehová;
Dichoso el hombre que confía en él.
9. Temed a Jehová, vosotros sus santos,
Pues nada falta a los que le temen.
10. Los leoncillos necesitan, y tienen hambre;
Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.
11. Venid, hijos, oídme;
El temor de Jehová os enseñaré.
12. ¿Quién es el hombre que desea vida,
Que desea muchos días para ver el bien?
13. Guarda tu lengua del mal,
Y tus labios de hablar engaño.
14. Apártate del mal, y haz el bien;
Busca la paz, y síguela.
15. Los ojos de Jehová están sobre los justos,
Y atentos sus oídos al clamor de ellos.
16. La ira de Jehová contra los que hacen mal,
Para cortar de la tierra la memoria de ellos.
17. Claman los justos, y Jehová oye,
Y los libra de todas sus angustias.
18. Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón;
Y salva a los contritos de espíritu.
19. Muchas son las aflicciones del justo,
Pero de todas ellas le librará Jehová.
20. El guarda todos sus huesos;
Ni uno de ellos será quebrantado.
21. Matará al malo la maldad,
Y los que aborrecen al justo serán condenados.
22. Jehová redime el alma de sus siervos,
Y no serán condenados cuantos en él confían.

domingo, 30 de enero de 2011

Salmos 91

Salmos 91

1. El que habita al abrigo del Altísimo
Morará bajo la sombra del Omnipotente.
2. Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
3. El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.
4. Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
5. No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
6. Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
7. Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.
8. Ciertamente con tus ojos mirarás
Y verás la recompensa de los impíos.
9. Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,
Al Altísimo por tu habitación,
10. No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.
11. Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.
12. En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.
13. Sobre el león y el áspid pisarás;
Hollarás al cachorro del león y al dragón.
14. Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;
Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.
15. Me invocará, y yo le responderé;
Con él estaré yo en la angustia;
Lo libraré y le glorificaré.
16. Lo saciaré de larga vida,

sábado, 29 de enero de 2011

Salmos 27

Salmos 27

1. Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?
Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
2. Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos,
Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron.
3. Aunque un ejército acampe contra mí,
No temerá mi corazón;
Aunque contra mí se levante guerra,
Yo estaré confiado.
4. Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré;
Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida,
Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
5. Porque él me esconderá en su tabernáculo en el día del mal;
Me ocultará en lo reservado de su morada;
Sobre una roca me pondrá en alto.
6. Luego levantará mi cabeza sobre mis enemigos que me rodean,
Y yo sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo;
Cantaré y entonaré alabanzas a Jehová.
7. Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo;
Ten misericordia de mí, y respóndeme.
8. Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro.
Tu rostro buscaré, oh Jehová;
9. No escondas tu rostro de mí.
No apartes con ira a tu siervo;
Mi ayuda has sido.
No me dejes ni me desampares, Dios de mi salvación.
10. Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con todo, Jehová me recogerá.
11. Enséñame, oh Jehová, tu camino,
Y guíame por senda de rectitud
A causa de mis enemigos.
12. No me entregues a la voluntad de mis enemigos;
Porque se han levantado contra mí testigos falsos, y los que respiran crueldad.
13. Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová
En la tierra de los vivientes.
14. Aguarda a Jehová;
Esfuérzate, y aliéntese tu corazón;
Sí, espera a Jehová.